- New Yorker Observer -
- The Wall Street Journal -
- New York Observer -
- Time Out New York -
- NBC -
El proceso de descubrimiento de mi personaje sigue incompleto; ha sido bastante desafiante y retador, pero, sobre todo, muy mágico y de mucho autodescubrimiento. ¿Qué tanto me identifico con mi personaje? Creo que hay cosas que son muy centrales en mi vida que comparto con Anya. Es lindísimo encontrar ese espejo, pero también le aprendo mucho de su determinación, fuerza, voluntad y amabilidad que tiene con el resto de las personas que la rodean. Aunque no tiene una familia o amigos, hasta que encuentra a Vlad y Dimitri; Anya ha ido conectando con cada persona que ha permanecido y siempre busca esa amabilidad, ese amor por la gente.
Un gran sueño hecho realidad, el esfuerzo de muchas personas de distintas áreas; por eso vale la pena que la gente se dé un tiempo para verla. No es nada más lo que ven en escena, también es el ensamble, el vestuario, la música, las pelucas, las personas que están en backstage, tramoya… un esfuerzo que no se pueden perder.
El mayor reto para interpretar a Dimitri ha sido que somos muy parecidos y distintos a la vez. Lo más difícil es interpretar un personaje parecido a ti. Tener que buscar en mis propias experiencias como actor y dárselas al personaje, encontrar cada aspecto de similitud y diferencias; ha sido un viaje muy enriquecedor. Una de las cualidades de Dimitri (y que más me gustan), es que tiene un gran corazón… él cree que tiene un plan para hacerse millonario, pero se termina enamorando. Al final, se da cuenta que todo cambia.
Un sueño hecho realidad que por fin está llegando a México. Nadie se lo puede perder. Tiene música espectacular y la actuación de mis compañeros… ¡increíble! Me siento honrado de compartir el escenario con ellos. ¡Tienen que venir a vernos!
Mi primer acercamiento con Vlad fue cuando vi la película de los 90, un personaje del cual me enamoré. Es sumamente paternal, tierno, cariñoso, pero que tiene este otro trabajo que consiste en cobijar a los personajes de Anastasia y Dimitri. Siempre lo he percibido como una figura paterna y ahora que tengo la oportunidad de interpretarlo, lo estoy haciendo desde ese punto de vista: a partir de lo que me transmitió la película animada, agregándole lo que me piden los directores y, por supuesto, lo que propone el texto. Vlad es un personaje encantador que van a amar de principio a fin y espero disfrutarlo por mucho tiempo.
¡PASIÓN, EMOCIÓN Y AMOR!
